Píldoras y tratamiento médico para la adicción

Introducción

La adicción al juego (ludomanía) se trata tradicionalmente con psicoterapia y autoayuda, pero con impulsos obsesivos expresados a las apuestas, las técnicas farmacológicas también son efectivas. En Australia se utilizan tres grupos de fármacos: antagonistas opioides, antidepresivos (SSRIs) y auxiliares (anticonvulsivos, N-acetilcisteína). A continuación, una revisión completa.

1. Antagonistas de opioides

1. 1 Naltrexona

Mecanismo: bloquea los receptores μ -opioides, reduciendo la sensación de «recompensa» a las apuestas.
Dosis: 50 mg una vez al día, hasta 100 mg. si es necesario.
Indicaciones: antojos pronunciados, recaídas frecuentes después de la psicoterapia.
Efectos secundarios: náuseas, mareos, dolor de cabeza; control de la función hepática antes de la asignación.

1. 2 Nalmefen

Mecanismo: es similar a la naltrexona, pero tiene una acción más larga y menos efectos desagradables.
Dosis: 18 mg una vez al día.
Indicaciones y limitaciones: prescrito cuando se desea jugar sin control, requiere la observación de un psiquiatra.

2. Antidepresivos (SSRIs)

2. 1 Fluoxetina, sertralina, escitalopram

Mecanismo: el aumento de los niveles de serotonina estabiliza el estado de ánimo, reduce la impulsividad y la ansiedad.
Dosificación: estándar - fluoxetina 20-40 mg/día, sertralina 50-100 mg/día, escitalopram 10-20 mg/día.
Indicaciones: depresión concomitante o ansiedad generalizada, pensamientos obsesivos sobre las apuestas.
Efectos secundarios: insomnio, disminución de la libido, trastornos gastrointestinales; el efecto se desarrolla en 4-6 semanas.

3. Anticonvulsivos y estabilizadores del estado de ánimo

3. 1 Topiramat

Mecanismo: modula los sistemas GABA- y Glutamat, reduce el «impulso de jugar».
Dosificación: comienzan con 25 mg/día, aumentando gradualmente a 100-200 mg/día.
Indicaciones: impulsividad expresada, frecuentes episodios «disruptivos».
Efectos secundarios: pérdida del apetito, trastornos de la memoria, parestesia.

3. 2 litio y valproatos

Mecanismo: estabilizar la actividad neuronal, prevenir cambios repentinos en el estado de ánimo.
Lecturas: cuando se combina la dependencia del juego y el espectro bipolar; control obligatorio de los niveles sanguíneos del fármaco.

4. N-acetilcisteína (NAC)

Mecanismo: normaliza la transmisión glutamatérgica, reduciendo las aspiraciones compulsivas.
Dosis: 600-1 200 mg dos veces al día.
Indicaciones: una ayuda en los pensamientos de juego obsesivos; a menudo se combina con psicoterapia.
Efectos secundarios: raros - indigestión, reacciones cutáneas.

5. Esquema de tratamiento e interacción con la psicoterapia

1. Evaluación por un especialista

Consulta de un psiquiatra o médico adicto: recolección de antecedentes, escala PGSI, pruebas de depresión (PHQ-9) y ansiedad (GAD-7).
2. Enfoque combinado

La prescripción simultánea de medicamentos y terapia cognitivo-conductual (TCP) acelera la reducción de los antojos y la recuperación del control.
3. Control y corrección

Reevaluación de la eficacia a las 4-6 semanas, corrección de dosis o selección del fármaco en respuesta insuficiente.
4. Duración del curso

Un mínimo de 6 meses, en casos graves, hasta un año con reducción gradual de la dosis bajo observación.

6. Contraindicaciones y recomendaciones especiales

Enfermedad hepática y renal: los antagonistas opioides requieren pruebas preliminares.
Embarazo y lactancia: la mayoría de los medicamentos no se recomiendan; la discusión de alternativas con el médico es obligatoria.
Combinación de fármacos: evite la ingesta simultánea de varios SSRIs y antagonistas opioides sin un control estricto.

Conclusión

La farmacoterapia en la adicción al juego en Australia incluye antagonistas opioides (naltrexona, nalmefeno), antidepresivos (SSRIs), estabilizadores del estado de ánimo y ayudas (topiramato, N-acetilcisteína). Un factor clave para el éxito es la combinación de medicamentos con psicoterapia y el monitoreo regular del especialista. Sólo un enfoque integrado garantiza una recuperación sostenida del control y previene las recaídas.